Afecciones respiratorias del recién nacido Displasia broncopulmonar (DBP)
¿Qué es la DBP?
La displasia broncopulmonar es una afección pulmonar grave que afecta a los recién nacidos. La mayoría de los recién nacidos que presentan DBP nacen más de 10 semanas antes de la fecha prevista, pesan menos de 2 libras al nacer y tienen problemas respiratorios.
Los bebés no nacen con DBP. La padecen como una complicación de otra afección respiratoria. Por ejemplo, la mayoría de los bebés que presentan DBP nacen con el síndrome de dificultad respiratoria (SDR). Sin embargo, otros tipos de afecciones respiratorias del recién nacido, las infecciones y las lesiones pulmonares debidas a tratamientos como la respiración mecánica pueden también causar DBP.
A los recién nacidos se les diagnostica DBP si todavía necesitan soporte respiratorio 28 días después de nacer, o alrededor del momento en que habrían alcanzado su fecha prevista de parto original.
¿Cómo afecta la DBP la salud del bebé?
La DBP puede causar muchos problemas de salud como:
- Dificultad para alimentarse, que puede resultar en la necesidad de alimentación por sonda
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), que ocurre cuando el ácido del estómago se devuelve al conducto que conecta la boca con el estómago (conocido como esófago)
- Hipertensión pulmonar, que es un aumento de la presión en los vasos sanguíneos que transportan sangre del corazón a los pulmones, conocida como arteria pulmonar
- Retraso del habla y problemas con la visión y la audición
- Dificultades de aprendizaje
- Defectos cardíacos como un conducto arterioso persistente
- Infecciones, como la
¿Qué causa la DBP?
La DBP es el resultado de que los pulmones de un recién nacido no se desarrollan normalmente mientras el bebé crece en el vientre, o no se desarrollan completamente si el bebé nació prematuro. Los bebés con DBP tienen pulmones frágiles que pueden irritarse o inflamarse fácilmente después de nacer.
Hay muchos factores que pueden aumentar el riesgo de que un bebé presente DBP, entre ellos:
- Parto prematuro, lo que aumenta el riesgo del síndrome de dificultad respiratoria
- Tratamiento a largo plazo para problemas respiratorios, como respiración mecánica y oxígeno suplementario, que pueden dañar los pulmones
- Infecciones, como la
- de los pulmones presente antes del nacimiento, posiblemente debido a una infección bacteriana de la (en inglés) conocida como corioamnionitis
¿Cómo se trata la DBP?
La mejor manera de tratar la DBP es encontrar la causa subyacente y tratarla si es posible. Mientras tanto, el equipo de atención médica de su bebé le brindará soporte respiratorio y minimizará el daño pulmonar tanto como sea posible.
Los tratamientos incluyen los que se enumeran a continuación.
- Presión positiva continua en las vías respiratorias (nCPAP):este dispositivo ofrece soporte respiratorio al introducir suavemente el aire hacia los pulmones a través de unas cánulas (tubo corto) colocadas en la nariz.
- Terapia de reemplazo de agente tensioactivo: se puede usar si un recién nacido tiene dificultad respiratoria a pesar del uso de nCPAP. A veces, administrar agente tensioactivo a un bebé requiere el uso de un tubo de respiración. Si es así, debido a las posibles complicaciones, el proveedor de atención médica de su bebé la ayudará a considerar los riesgos y beneficios de la intervención.
- Medicamentos: se pueden usar diuréticos, broncodilatadores y cafeína con tratamientos que soportan la respiración.
La mayoría de los bebés mejoran gradualmente en los 2 a 4 meses siguientes al diagnóstico de DBP. Una vez que la función pulmonar mejora hasta el punto en que el bebé puede respirar por sí solo, se le puede retirar el soporte respiratorio y otros tratamientos.
Es posible que algunos bebés puedan salir del hospital, pero aún podrían necesitar tratamientos respiratorios de soporte administrados en casa. Antes de que un bebé salga del hospital, es importante que esté al día con todas las vacunas, ya que es especialmente vulnerable a infecciones víricas, que podrían requerir una nueva hospitalización.
Dependiendo de la gravedad de la DBP, es posible que se presenten problemas respiratorios de por vida. Los niños y los adultos que tuvieron DBP cuando eran bebés pueden tener una función pulmonar reducida. Esto puede generar síntomas como sibilancias y falta de aire que pueden dificultar las actividades como el ejercicio.