Afecciones respiratorias del recién nacido Tipos
Diferentes afecciones pueden causar que un bebé tenga problemas para respirar poco después de nacer.
Taquipnea transitoria del recién nacido (TTN, por sus siglas en inglés)
La taquipnea transitoria del recién nacido es la afección respiratoria más comúnmente diagnosticada en los recién nacidos.
Antes de que un bebé nazca, sus pulmones están llenos de líquido. En la mayoría de los bebés, este líquido desaparece poco después de nacer, pero a veces no desaparece tan rápido como debería. Esto causa TTN. Su bebé puede correr un mayor riesgo de presentar TTN si usted tiene diabetes, asma o un parto por cesárea sin haber estado en trabajo de parto. Con el tratamiento adecuado, la TTN suele mejorar cuando el bebé tenga 3 días de nacido.
Síndrome de dificultad respiratoria (SDR)
El síndrome de dificultad respiratoria afecta a la mayoría de los bebés que nacen antes de las 32 semanas de embarazo. Esto se debe a que los recién nacidos prematuros no pueden producir la cantidad adecuada de agente tensioactivo. El agente tensioactivo es una sustancia espumosa que mantiene los pulmones completamente expandidos para que los recién nacidos puedan respirar aire una vez que nacen. También mantiene los pulmones abiertos para que cuando el bebé exhale, los pulmones no colapsen. Sin este agente, los pulmones colapsan y el recién nacido debe esforzarse más para respirar. El síndrome de dificultad respiratoria, conocido también como enfermedad pulmonar del prematuro, puede convertirse con el tiempo en una afección más grave y persistente conocida como displasia broncopulmonar (DBP) que requiere oxígeno, un respirador o medicamentos para ayudar con la respiración.
Obtenga más información sobre el síndrome de dificultad respiratoria y la displasia broncopulmonar .
Hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN)
La hipertensión pulmonar persistente del recién nacido (HPPRN) causa alta presión en los vasos sanguíneos de los pulmones del recién nacido, lo que les dificulta trasportar oxígeno a la sangre del aire que respiran. Esto causa dificultad para respirar y una frecuencia respiratoria rápida.
En la mayoría de los bebés, tras las primeras respiraciones después de nacer, el aire entra en los pulmones, aportando oxígeno que ayuda a relajar los vasos sanguíneos de los pulmones. Esto ayuda a que la sangre fluya fácilmente. Cuando la sangre fluye a través de los pulmones, recoge el oxígeno que se necesita en todo el cuerpo. En los recién nacidos con HPPRN, los vasos sanguíneos de los pulmones no se relajan en respuesta al oxígeno en el aire y la sangre no puede pasar fácilmente a través de las bolsas de aire de los pulmones para recoger oxígeno a medida que fluye. Dependiendo de la gravedad de la tensión de los vasos sanguíneos y de la causa de la HPPRN, su hijo puede necesitar medicamentos y asistencia médica intensiva a corto plazo. Los efectos a largo plazo de la HPPRN incluyen una disminución de la capacidad para hacer ejercicio y otras discapacidades, como una función pulmonar y cardíaca deficiente, así como dificultad para el aprendizaje.
Neumonía
La neumonía es una infección del pulmón causada por bacterias
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, u
(en inglés). Los recién nacidos pueden experimentar síntomas que varían de leves a graves según la causa y la rapidez con la que se inicia el tratamiento.
Obtenga más información sobre la neumonía y sus síntomas en personas de todas las edades.
Apnea
La apnea ocurre cuando un bebé deja de respirar durante varios segundos seguidos. Esto puede hacer que el corazón del bebé lata más lentamente (bradicardia) y puede volverse pálido o de color azulado (cianótico). Hay muchas causas de la apnea y, en algunos bebés, los médicos no pueden encontrar una causa exacta. En ese caso, es posible que sea necesario colocar al bebé en un dispositivo de monitoreo que alerte sobre cada evento, incluso pausas breves que mejoran por sí solas. Consulte con el proveedor de atención médica de su bebé para saber cuánto tiempo debe estar monitoreado. En la mayoría de los casos, la apnea es una afección temporal que mejorará con el tiempo.