Sarcoidosis
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Sarcoidosis

Sarcoidosis Vivir con sarcoidosis

Controle su afección

Incluso si no tiene síntomas, debe ver a su proveedor de atención médica para recibir atención continua. Por ejemplo, el proveedor monitoreará la aparición de efectos secundarios por el uso a largo plazo de corticosteroides u otros medicamentos.

Si la enfermedad no empeora, es posible que se lo vigile atentamente para ver si la enfermedad desaparece por sí sola. Si la enfermedad empieza a empeorar, el médico puede recetarle un tratamiento.

Remisión y exacerbaciones

Si la sarcoidosis entra en remisión, el médico puede dejar de administrar sus medicamentos con cuidado. No obstante, usted deberá seguir prestando atención a la presencia de exacerbaciones. Si tiene una exacerbación, tal vez necesite otro ciclo de tratamiento.

Las exacerbaciones pueden ser difíciles de predecir. Casi siempre ocurren en un plazo de seis meses desde la interrupción del tratamiento. Cuando más tiempo pase sin síntomas, menos probable será que tenga una exacerbación.

Pruebas para detectar complicaciones

Algunas personas tienen sarcoidosis que persiste o reaparece durante muchos años después del diagnóstico. Esto puede recibir el nombre de sarcoidosis crónica, grave, avanzada, refractaria o progresiva. El proveedor puede indicarle pruebas para hacer un seguimiento de la afección y controlar si hay complicaciones. En la sección Diagnóstico hay información sobre esas pruebas.

Sepa cuándo debe solicitar atención médica

Preste atención a los signos de advertencia o las complicaciones que pueden requerir un tratamiento médico de emergencia. Estos incluyen signos de cambios en la visión que pueden ser un signo de tumores en el cerebro. Otras complicaciones que requieren atención médica inmediata son la insuficiencia renal, el paro cardíaco súbito y la falta de aire o debilidad muscular súbitas.

Haga cambios para tener un estilo de vida saludable

Un estilo de vida saludable puede ayudarlo a sentirse mejor y prevenir el empeoramiento de la sarcoidosis.

  • Haga actividad física con regularidad. Hacer ejercicio puede ser difícil debido al cansancio extremo si tiene sarcoidosis. Sin embargo, la actividad física puede mejorar el nivel de energía y aliviar otros síntomas, como la falta de aire y la debilidad muscular. Trate de mantenerse activo, pero hable con su médico acerca del nivel de actividad física indicado para usted.
  • Deje de fumar. Si fuma, déjelo. Trate de evitar también otros irritantes para los pulmones, como el polvo, las sustancias químicas y el humo de segunda mano. Visite El tabaquismo y el corazón y Su guía para un corazón saludable. Para recibir ayuda para dejar de fumar en forma gratuita, puede llamar a la línea de ayuda para dejar de fumar del Instituto Nacional del Cáncer al 1-877-44U-QUIT (1-877-448-7848).
  • Trate de dormir lo suficiente y que el sueño sea de buena calidad. Los expertos recomiendan que los adultos duerman de 7 a 9 horas por día.

Vea más información sobre estos cambios para un estilo de vida saludable en nuestro tema de salud Hábitos saludables para el corazón.

Cuide la salud mental

La sarcoidosis puede hacer que sienta soledad, ansiedad o depresión. Es posible que siga sintiendo mucho cansancio incluso después de haber finalizado el tratamiento. Pero hay ciertas actividades o tratamientos que pueden ayudar a mejorar su salud mental.

  • La terapia, en especial la terapia cognitiva, puede ser útil.
  • Unirse a un grupo de apoyo para pacientes puede ayudar a adaptarse a la vida con sarcoidosis. Puede ver de qué manera otras personas manejan síntomas similares y su afección. Hable con su proveedor acerca de grupos de apoyo locales o consulte en un centro médico de la zona.
  • Hable con su médico sobre los medicamentos u otros tratamientos. Los antidepresivos u otros tratamientos pueden mejorar su calidad de vida.
  • El apoyo de familiares y amigos puede ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad. Comente cómo se siente con sus seres queridos y dígales qué pueden hacer para ayudar.

Embarazo

La mayoría de las mujeres con sarcoidosis tienen bebés sanos. Sin embargo, tienen mayor riesgo de desarrollar ciertas complicaciones, como:

  • sangrado abundante después de dar a luz
  • parto prematuro
  • preeclampsia, que es presión arterial alta y demasiada proteína en la orina
  • tromboembolia venosa, que es un coágulo de sangre en los pulmones o las venas profundas, por lo general, de las piernas

Si tiene sarcoidosis y está embaraza o planea quedar embarazada, hable con su médico. Es importante una buena atención prenatal y hacer controles periódicos de la sarcoidosis antes del embarazo, durante el embarazo y después del parto. Además, dígale al médico los medicamentos que usa. Algunos medicamentos para la sarcoidosis no son seguros durante el embarazo.

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