Linfopenia Diagnóstico
El proveedor de atención médica hará el diagnóstico de linfopenia en función de sus antecedentes médicos y familiares, un examen físico y los resultados de las pruebas. Las pruebas para tamizaje en recién nacidos puede permitir el diagnóstico temprano de enfermedades que pueden causar linfopenia potencialmente mortal.
Un recuento de linfocitos bajo por sí solo posiblemente no cause ningún síntoma. La afección con frecuencia se encuentra durante un control de rutina o cuando el médico realiza pruebas para otras enfermedades o afecciones. En otros casos, el médico quizás le solicite pruebas para diagnosticar la linfopenia después de observar que tiene infecciones inusuales, infecciones a repetición o infecciones que no curan rápidamente.
Antecedentes médicos y examen físico
Su médico le hará un examen físico para buscar signos de infecciones, como fiebre. Posiblemente investigue la región abdominal para detectar signos de un bazo de tamaño mayor que lo normal y el cuello o las axilas para detectar signos de que son más grandes que lo normal.
Además, el médico evaluará la presencia de síntomas de enfermedades y afecciones que pueden afectar su recuento de linfocitos, como VIH o neoplasias malignas de la sangre.
Posiblemente su médico le pregunte:
- acerca de su riesgo de sufrir una infección por VIH, como el uso de drogas intravenosas (i.v.), parejas sexuales, exposición en el trabajo a sangre o fluidos corporales infectados o transfusiones de sangre,
- si alguna vez recibió tratamientos contra el como radiación, quimioterapia o inmunoterapias;
- si alguna vez se le diagnosticó una enfermedad hematológica o un trastorno inmunológico, o si tiene antecedentes familiares de dichas enfermedades;
- acerca de su dieta y otros hábitos del estilo de vida.
Pruebas de diagnóstico
Es probable que su médico le recomiende que se realice análisis para diagnosticar un recuento bajo de linfocitos. Algunos de estos análisis quizás deban repetirse.
- El hemograma completo con recuento diferencial analiza la cantidad de linfocitos, así como de , , y otros tipos de glóbulos blancos en la sangre.
- La citometría de flujo mide los niveles de diferentes tipos de linfocitos: linfocitos T, B y células citolíticas naturales. Esto ayuda a los médicos a encontrar la causa de base de la linfopenia.
- Los análisis de los niveles de inmunoglobulinas mide los niveles de anticuerpos llamados inmunoglobulinas, fabricadas por los linfocitos B. Los niveles totales pueden ser bajos debido a recuentos bajos de linfocitos B, o es probable que algunos grupos de linfocitos B, aunque estén presentes, sean disfuncionales y no produzcan cantidades normales de algunos subgrupos de anticuerpos.
- Otros análisis pueden evaluar la presencia de diferentes enfermedades que causan linfopenia, como el VIH, la COVID-19 u otros virus, la tuberculosis, u otras afecciones hematológicas o inmunológicas. Es posible que el médico también analice la médula ósea o los .
Qué significan los números
Los niveles normales de linfocitos son diferentes en adultos y niños, y pueden variar más según la edad o la salud general.
- Adultos: Un recuento normal de linfocitos habitualmente está entre 1000 y 4800 linfocitos por microlitro de sangre. El médico podrá hacer el diagnóstico de linfopenia si tiene menos de 1500 linfocitos por microlitro de sangre en adultos.
- Niños: El recuento normal de linfocitos varía según la edad del niño. El porcentaje y el recuento absoluto de linfocitos son más altos en niños muy pequeños. Los niños de 6 años o menos pueden tener linfopenia si tienen menos de 2000 linfocitos por microlitro de sangre.